Los tejados son elementos de las edificaciones que brindan muchos beneficios para nuestro confort. No obstante, si estos tejados no se construyen de forma óptima y con ciertas características imprescindibles, pueden llegar a ser todo lo contrario y ocasionar dolores de las cabezas. La construcción de los tejados ha ido variando con el paso de los años, por lo que lo que se necesita hoy en día de un tejado no es lo mismo que se necesita de un tejado de hace muchos años atrás. Por ejemplo, antes no se considera el factor ventilación en los tejados, mientras que ahora es una característica imprescindible al igual que el aislamiento térmico y la impermeabilización. De estas tres características te hablaremos más a fondo a continuación.
La ventilación
La ventilación es uno de los factores más importantes a tener en cuenta en la construcción de un tejado, pues de él depende la eficiencia y durabilidad del tejado. Para lograr una buena ventilación se desaconseja el uso de mortero y, en cambio, se recomienda el rastrillado de madera y la fijación mecánica. Por otra parte, para tener una buena ventilación, también es obligatorio dejar un mínimo espacio para una cámara de aire por debajo de la cara interior de la teja, lo cual posibilitará la micro-ventilación requerida.
Otros materiales se pueden usar para facilitar la ventilación de los tejados, tales como las mallas antipájaros que tapen las tejas de alero para evitar que se acumule la humedad, los remates en los caballetes mediante láminas transpirables e impermeables, etc. Estos accesorios garantizarán la larga vida útil del tejado y proveerán una excelente climatización al hogar. Asimismo, cabe destacar que una buena ventilación no solo es favorable para el confort térmico humano, sino también para impedir la aparición de musgos u hongos en los tejados debido a la acumulación de humedad.
Aislamiento térmico
El aislamiento térmico de los tejados es aquel que reduce la transferencia de calor entre la capa externa y la capa interna de los tejados. Cuando se logra un excelente aislamiento térmico, la eficiencia energética en el interior del hogar mejora, lo cual hace que los equipos de refrigeración o de calefacción consuman menos energía y funcionen mejor. Esto no solo es bueno para tu bolsillo, sino también para el medio ambiente y para tu confort térmico.
De acuerdo a los datos recopilados por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y la Asociación de Fabricantes Españoles de Lanas Minerales aislantes (AFELMA), un buen aislamiento térmico es capaz de reducir en 40% o 70% el consumo de energía eléctrica en los hogares, dependiendo de la calidad del aislamiento. Como dato curioso, cabe decir que ya desde el año 2006 el Código Técnico de la Edificación regula el aislamiento térmico en los tejados, recomendando qué tipo de aislamiento térmico se de usar en cada zona, tomando en cuenta diversos factores climatológicos, siendo la temperatura de cada lugar el más importante de ellos. Lo normal es que, mientras más calor, más aislamiento térmico se recomienda.
Impermeabilización
La impermeabilización no es nada más que esa cubierta que recubre al tejado con el objetivo de proporcionar una capa extra de protección frente a las diversas condiciones climatológicas y, principalmente, evitar cualquier tipo de filtración, fugas o problemas de humedad. Además, la impermeabilización brinda un aislamiento térmico necesario para cumplir con la característica anteriormente mencionada. Asimismo, es importante mencionar que la cubierta de la impermeabilización es la que soportará todos los embates y desgastes del paso del tiempo, por lo que requiere de cierto mantenimiento y de la asesoría de profesionales en el asunto tanto para ser aplicado como para ser conservado.
Por ello, te recomendamos que te comuniques con nuestra empresa de reparacion de tejados Madrid para obtener toda la información que necesites saber sobre los tejados y la impermeabilización de los mismos.