La pizarra puede presentarse en baldosas, losas, peldaños o tableros, por ejemplo. En cualquier caso, lo primero será llevar a cabo la limpieza de la superficie de piedra; luego será cuando podrá aplicarse el protector contra las manchas. En este sentido, es importante acertar con el producto. Hay limpiadores muy recomendables:
Lipis de Teais. Previamente hay que agitarlo. Se aplica con rodillo o brocha. Son dos capas a intervalos de una hora. Después de una hora, se lava con agua a presión. Acaba con la suciedad diaria y con los microorganismos.
Deter de Teais. Se diluye con agua y se aplica sobre la piedra. Se deja que actúa durante dos o tres minutos y se limpia con la ayuda de un cepillo. Acaba con la suciedad de las obras, así como con las incrustaciones de óxido o salitre.
Coais Super Gel de Teais. Se plica con pincel o brocha. Hay que dejarlo que actúe durante un tiempo que oscila entre uno y quince minutos. Al acabar hay que aclararlo con mucha agua. En función de los residuos que tengan que eliminarse y de la posición de cada zona o pieza, se aplicará diluido o puro. Se emplea en piscinas, terrazas fuentes y fachadas. Elimina restos de cal, cemento u óxido.
Aplicación del producto anti-manchas
No hace falta diluir en agua el protector de FILA. Este anti-manchas se aplica directamente sobre la piedra, que deberá estar bien limpia; basta con frotar el producto con la ayuda de un trapo, ya que de este modo no quedarán los típicos charcos e impregnaciones que pueden originar las brochas o las esponjas. Cuanta menos cantidad apliquemos, más naturalidad habrá en el resultado; si se trata la piedra en varias ocasiones, el brillo será mayor. El papel de cocina puede servirnos para retirar los excesos resultantes; aplicar las capas de ocho en ocho horas es lo recomendable.
Utilidad del protector contra las manchas
Por medio de este producto será posible proteger el material, así como devolverlo a su color primigenio. Su aplicación es efectiva frente a toda clase de agentes atmosféricos y frente a todo tipo de manchas orgánicas, ya sean de restos comidas, de bebidas o de otras grasas. Este protector aporta un efecto reavivante; además, genera un rendimiento muy alto y natural, no se vuelve amarillo con el tiempo, soporta el impacto de los rayos ultravioletas y puede aplicarse tanto en interior como en exterior.